Primer Congreso Constituyente

ACTAS DE LAS SESIONES SECRETAS 201 Despues de una larga discusión se acordó, el que se suspendiese por la Junta la promulgación del Decreto, mientras tanto se acordaba lo conveniente en otra sesión, y se levantó la secreta. (Fdo.) José de Larrea y Loredo Presidente José Sánchez Carri6n Diputado Secretario Pedro Pedemonte Diputado Secretario (f. 12) SESION DEL DIA 7 Leída y aprobada el acta anterior, se leyó el Decreto que se debía pasar al Gobierno sobre la colocación de los peruanos en cargos del Pe– rú con la reforma que se había acordado en la sesión anterior. Fué aprobado. El Sr. Unanue insistió en que debían comprometerse a todos los peruanos como lo había hecho presente en la sesión anterior. El Sr. Pezet. El Congreso no debe vacilar en sus determinaciones. Se va haciendo ilusoria la colocación de los peruanos. El señor Mariátegui. Yo comprometí a muchos oficiales realistas, los que se quedaron en la Capital en la entrada de la Patria, y la recom– pensa ha sido posponerlos. y pedirles los títulos, y aunque se dió orden para que estos se colocasen, los Jefes no lo han verificado. El Sr. Una– nue se ha equivocado cuando ha dicho que los oficiales de Lima no han pedido colocación, pues un oficial Velarde, y otros de bastante mé– rito la han pedido, y solamente se mandó el que se les tuviese presen– tes. El mal está en la Secretaría de Guerra, y así es de necesidad que el Sr. Presidente del Congreso trate con el Gobierno, y le exponga los abusos que se observan en dicha Secretaría. El Sr. Presidente. Ya he dado algunos pasos sobre el particular, los que he creído han sido desatendidos: fuí la última vez personalmente al Gobierno, mas no se me proporcionó ver a los SS. de la Junta. (f. 13.) El Sr. Ortiz. Que habiendo tratado con lo~ SS. de la Junta con arreglo a las instrucciones que le había dado el Sr. Presidente del Congreso, sobre que en los cuerpos se premiase el mérito de Velazco, Gamarra, Risco y otros varios. El descontento general por la continua– ción de Guido, sobre la colocación de Vivero, Berindoaga y otros. Le