Primer Congreso Constituyente

ACTAS DE LAS SESIONES SECRETAS 203 su adhesión a la causa de Colombia, y después de una ligera discusión, se acordó se devolviese a la Junta Gubernativa, para que provea en el expediente del referido Tavara, sin considerarse el efecto a los demás Estados Independientes, un obstáculo de cualesquiera individuo, mien– tras no contrarie con su conducta a los intereses del Perú. Se leyó la nota del Secretario de Colombia, en la que da noticia de Ja Expedición que se dice ha sali- (f. 14) do de la Isla de Cuba sobre el Itsmo de Panamá, en cuya virtud no podrá verificar el Liber– tador el ofrecimiento que ha hecho de cuatro mil hombres, y exige se nombren Plenipotenciarios para arreglar los verdaderos límites de am– bos Estados. El Congreso quedó enterado y se levantó la sesión. (Fdo. ) José de Larrea y Loredo Presidente José Sánchez Carri6n Diputado Secretario SESION DEL DIA 11 Pedro Pedemonte Diputado Secretario Leída el acta anterior fué aprobada después de haberse agregado a ella lo que se había resuelto por el Soberano Congreso con relación a la noticia del Secretario de Colombia sobre la expedición que se dice ha salido de la Isla de Cuba sobre el Itsmo de Panamá, y fué el que se comunicase la noticia a los Estados de Clúle y Buenos Ayres, y a los Cuerpos del Ejército Expedicionario. El Sr. Paredes (Dn. Gregorio) hizo presente el que era de necesi– dad para el arreglo del calendario, se resolviese sobre quienes debían tener el tratamiento de Señoría Ilustrísima, pues advertía que (f. 14 v.) a los Secretarios de Estado se les daba en todo lo oficial, y se resolviú el que solamente 18 debían tener la Alta Cámara de Justicia y Munici– palidad, cuyo aviso debía pasarse a la Junta Gubernativa. El Sr. Tudela. Que en atención a los resultados que debían temer– se de la expedición contra Panamá, sería muy conveniente oficiar a Lord Cochrane para que se encargase del mando de la Armada del Perú. El Sr. Luna Pizarro opinó del mismo modo, agregando que debe temerse que dicha Expedición venga al Callao, y que Colombia y Mé– jico debían igualmente costear algunos buques por el interés que tienen en sus respectivas costas.