Quinto Congreso Internacional de Historia de América

32 CÉSAR A. ÁNGELES CABALLERO "A ésta administró la retaguardia y fue la encargada de aprovisio-– nar a las huestes rebeldes, tarea difícil a causa del desorden que existía en todas las líneas de la producción" ( 7). A esta administración, entendida genéricamente, debe agregarse el suministro específico de diversos elementos bélicos, detallados en las cartas que enviara a Túpac Amaru: -Dinero: " ... remitiéndote seis cientos pesos ... " ( Tungasuca, 23 de Noviembre de 1780). " ... también lleva 6 pesos, 2 cestos de coca, todo lo que entregará el conductor". ( Tinta, 7 de Marzo de 1781). -Armamento: Remito con el portador quinientos veinte y seis cartuchos de fusil. con balas: de cañón 30 cartuchos para lo mismo, y no va pólvora, porque en lo pronto no hay sino de cañón ... ". " ... remito con los portadores los pertrechos que Vuestra merced me pide y constan de la inclusa razón". (Tinta, 23 de Marzo de 1781). "De Livitaca piden pertrechos porque se hallan atacados por los Paruros, he determinado enviarles un cañón de cuatro que se han fundido ... " (Tinta, 23 de Marzo de 1781 ) . c) Reclutamiento de tropas.- " ... cuando era necesario, ayu-– daba personalmente al reclutamiento de indios y mestizos" (8). El reclutamiento de tropas se hace más ostensible y se prueba con lo expresado en la carta que Micaela Bastidas dirigiera a Túpac Amaru el 7 de Diciembre de 1780, desde Tungasuca: "Hallándome prevenida para la marcha el lunes once del corriente para Paruro, a cuyo efecto estoy convocando a los indios de todos pueblos ... ". Desde Pomacanchi, insiste en este reclutamiento: "Yo me hallo en este Pomacanchi haciendo más gente". ( Diciem-– bre de 1780). Y luego en Tinta ( Febrero de 1781) : "Yo voy despachando cUanta gente puedo, y ahora despacho mozos a los demás pueblos a que hagan lo mismo". En suma, " ... excitó el espíritu combativo de los indios ... '' ( 9). d) Insinuación de Ciertas Actitudes Tácticas.- Inevitablemente que en toda la acción guerrera de Túpac Amaru: "Aunque doña Micaela Bastidas,. como cualquier otro jefe, acata las órdenes de Túpac Amaru, su temperamento la empujaba a no