Quinto Congreso Internacional de Historia de América

84 ABEL CARRERA NARANJO ciudades. En las ciudades de cierta importancia, precisamos. Mao Tse Tung, por el contrario, le hubiera aconsejado -como hacía Micaela– jugarse el todo por el todo lanzando mortal estocada al corazón del ad,.. versario: el Cuzco. Micaela, su varonil esposa, dínamo de la rebelión, lo instaba sin descanso, escribiéndole: "estás dando tiempo a los ene,.. migos para que se armen y hagan destrozos con nosotros". En otra carta insiste en la inmediata posesión de la ciudad, subrayando que el tiempo perdido "me quita la vida, que ni aún ya tengo carnes ni estoy en mi". La verdad es que las fuerzas defensoras de la capital de los incas eran muy reducidas y que acaso la victoria de los insurrectos en el Cuzco hubiese resultado sine sanguine como la batalla blanca de San Martín por la posesión de Lima. Pero no olvidemos que también San Martín, pese a disponer de un magnífico ejército, chileno~argentino, ya fogueado y de más alta mo,.. ral que el realista, se mantuvo indeciso largo tiempo, y no por pocos días, como el rebelde peruano. Recordemos, en efecto, que en octubre de 1820, una parte del ejér,.. cito libertador desembarca en Ancón y lanza su vanguardia hasta Puente Piedra. a las puertas mismas de Lima. En vez de atacar a los atemoriza,.. dos batallones realistas -"prontos a la deserción", según declaración de sus propios jefes- las tropas libertadoras, con agradable sorpresa del virrey, vuelven las espaldas y se alejan de Lima para no detenerse sino en Huaura. región en la que permaneceen más de seis meses, inactivas. Re,.. cardemos una segunda aproximación a Lima de los patriotas, en su marcha de Huaura a Chancay, y contramarcha de Chancay a Huaura. Recorde,.. mos. en fin. que el general San Martín no ingresó a la Ciudad de los Re,.. yes, a pesar de ser instado a ello por el intrépido Cochrane, hasta no estar plenamente convencido de que era llamado por sus habitantes. Asaltado por la duda, pensando el pro y el contra de su marcha al Cuzco -atormentado Javert, ya en su otra personalidad, la de Hom,.. bre, indeciso largo tiempo sobre si infringirá su deber de Policía y deja escapar al infeliz Juan :Valjean-, sí podemos estar persuadidos que una terrible tempestad estallaría en esos momentos en el cráneo del inca. De todos modos, a la manera del general argentino, se alejó de su objetivo inmediato y prosigue su marcha conquistando varias provincias de la periferia, llegando finalmente a Azángaro, población en la que red,.. bió alarmantes noticias de Micaela, respecto de los importantes prepara,.. tivos desarrollados por la Junta de Guerra. Alertado y aguijoneado por su intrépida lugartenienta -mujer del espíritu batallador de Juana de Arco-, marchó rápidamente al Cuz,.. co, deteniéndose, no obstante, en las alturas de Picchu, situadas a poco