Fénix 10, 261-286

PAGINAS OLVIDADAS 275 medio de los esplendores de un teatro, admirando una garganta ebúrnea y unos dientes alabastrinos, oye salir, de entre ellos, esas cascadas de deliciosas notas que se llaman gorjeos. eQué cosa es la poesía? Sin pretender que se acate nuestra definicion diremos que, en sí misma, la poesía es cierta emoción especial, vaga y profun- da que causa en nosotros la contemplacioi~de las cosas y de los sentimientos humanos: la combinación de notas, de formas, de colores y de pensamientos que reproducen esa emoción es lo que constituye la poesía en la música, en la estatuaria, en la pintura y en la literatura. Cuanto más exacta, pura y co- rrecta, oportuna, moderada, inefable, e intensa es la emoción reproducida, más poesía hay en ella. El arte puede trazar a la poesía los límites que no debe traspasar en sus manifestaciores, pero es impotente e insensato cuando aspira a señalarle, con reglas convencionales, el camino que ha de seguir. La fa- cultad de sentir esa emoción especial y de expresar lo que siente de manera que se reproduzca en los demás es lo que, a su vez, constituye el don divino del poeta. El encanto es incontestablemente mayor cuando la emoción está reproducida en !a hermosa y conora forma del verso. El don divino es innaio; pero la exactitud, la pureza, y la corrección de sus manifestaciones pueden adquirirse. Basta para corroborar esta verdad que el lector compare la primera parte de este libro, brote natural de los pri- meros años, con la segunda, fruto de la juventud ilustrada y laboriosa. En aquélla notará a primera vista las incorrecciones e inexperiencia del adoles- cente poeta; en ésta no sólo admirará al poeta hombre sino que saboreará la virilidad, la gracia y el arte de la forma adquiridos ,en años de trabajo, cons- tancia y desvelos. Palma es ya conocido como escritor en toda la América española por sus numerosos versos reproducidos en "El Correo de Ultramar", por los juicios que en el mismo diario han aparecido sobre sus obras, por los muchos perió- dicos de America en qiie ha colaborado, por sus ANALES DE LA INQUISI- CION DE LIMA, por sus correctas leyendas sobre tradiciones locales de su país, por sus felices imitaciones de los CANTARES de Trueba, por su colec- ción de poetas del Perú, Chile y Bolivia que lleva el título de LIRA AMERI- CANA, y por el volúmen ARMONIAS que dió a luz en París en 1865. To- dos estos trabajos forman el contingente de su vida literaria y son las hermo- sas flores de su corona de poeta. El volúmen de poesías que el lector tiene entre las manos es un ver- dadero ramillete de PASIONARIAS. Encierra la vida, el perfume, la atercio- pelada voluptuosidad y los purisimos matices de las flores con cuyo nombre ha sido bautizado. La sociedad culta y literaria de las repúblicas españolas lo leer6 con particular placer, y los versos del poeta peruano encontrarán en ella corazones que los sientan, memorias que los conserven y labios que los reciten. Eri El Nacional: Fechado a! final: "E! Havre, niarzo 1873". En Pacionarias (Lima, 1870) y en las e d i c i ~n e sde las Poesías completas de dcn Ricardo Palma. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.10, 1954