Fénix 12, 142-144

144 FENIX mientos que allí no eran muy extendidos, y seguramente (sic) utilizó como obra de texto la de Cad,ena. Como Barbacci no documenta su afirmación, no es posible conocer los argumentos sobre que la cimenta, aunque evidentemen- te no deja de ser extraño que Alcedo utilizara para su labor didáctica un texto que databa de sesenta años atrás y que, a mayor abundamiento, no haya dejado huella alguna de tal aprovechamiento en su Filosofía elemental de la música (Lima, 1869). De todas formas, Cadena debió ser espíritu ingenioso y emprendedor, pues en 1765 ofrecía al Conde de Monte Blanco, D. Agustín de Salazar y Muñatones, probablemente para su instalación en alguna hacienda de Ca- ñete o Chincha, una máquina de moler caña que había inventado, construyén- dola con arreglo a los principios matemáticos y sujetándose a los fundamen- tos de la Mecánica ( 1 ) . Como no hay constancia de que extendiera testamento ante algún escri- bano limeño, ignoramos cuándo murió Cadena, y si falleció en Lima. ( 1 ) Folleto de cuatro hojas, impreso en Lima en la Oficina de la calle de la Encarnación. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.12, 1956-1957

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx