Fénix 12, 250-263

EL SERVXCIO DE PRESTAMOS EN LAS BIBLIOTECAS PUBLICAS 25 1 El Servicio de Préstamos no es ciertamente atributo de la Biblioteca Pública. También se realiza en otros tipos de biblioteca. Pero en estas no al- canza proporciones tan enormes como en las Bibliotecas Públicas importantes, cuyos préstamos pueden contarse por millones, haciendo claramente visible que uno de los principales problemas que debe resolver el Servicio, es la ra- pidez del proceso de entrega y devolución. Los principios en que se basa ei Servicio de Préstamo podrían resumirse como sigue: Material.-Si bien es verdad que toda la colección de libros de una bi- blioteca está al servicio de los lectorer, tratándose del Servicio de Préstamo se prescinde de la colección denominada de Consulta. ]Es la Sección Consulta una dependencia de la Biblioteca en la que el Servicio se da unicamente dentro del local. Esta colección -integrada por Enciclopedias, Diccionarios, Guías, Directorios, Anuarios, Atlas, etc.- responde a la consulta rápida y como las obras respectivas son solicitadas constantemente por el público, se hace im- posible justificar su ausencia del local de la biblioteca. Son innumerables las bibliotecas en las que el lector debe servirse del catálogo como Único medio para encontrar lo que desea. Hay muchisimas hi- bliotecas sin embargo -y podría entre ellas citarse sin excepción todas las bibliotecas públicas inglesas- que tienen implantado el servicio denominado de "estante abierto", y en las que el lector va directamente al espacio de los estantes destinados a la materia de su interés. Si bien el "estante abierto" ha suscitado innumerables objeciones por el peligro de desorden que entraña, ha sido sin duda un paso seguro para liberar al lector de tener que depender de los datos consignados en una tal jeta y correr e! albur de recibir la respues- ta de que el libro solicitado no está disponible. La libertad para revisar una colección a voluntad, eleva decididamente el porcentaje de libros en présta- mo; porque, vaya el lector con intención de encontrar determinado libro o no, la facilidad de buscarlo en los estantes le da la oportunidad de ver personal- mente diferentes libros entre los que puede seleccionar con mayor acierto el que llene mejores condiciones. Es una política que nbre nuevos campos de in- terés, que en otra forma pasarían desapercibidos. Es de efecto psicológico, ade- más, ese contacto directo entre la persona y Ics libros, pues se crea una rela- ción ainistosa y noble que al generalizar el hábito de la lectura redundará en el mejoramiento de cada comunidad. En cuanto a la objeción de que el servi- cio de "estante abiert~"requiere personal que revise constant'emente los es- tantes, no es menos cierto que el estante cerrado necesita personal para buscar los libros y alcanzarlos al lector en el mostrador de préstamo. Cantidad.-La cantidad de libros que puede sacarse en préstamo es su- mamente variada, se ciñe al tipo de biblioteca o a la política que ésta adopte. Las hay que sólo prestan un libro por vez y las hay de préstamo ilimitado. Por lo general, puede tomarse como promedio de dos a cuatro libros por vez. Plazo.-Generalmente el período por el cual se hace el préstamo va- Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.12, 1956-1957