Fénix 12, 78-141

FENIX - Lida - Romance Histórico Escr~to para Folletín del Mensagero por Manuel Ricardo Palma Lima. Imprenta del "Mrnsagero". 1835 2 p., 18 p. numeradas, 2 p.; 15 x 9 cm. (EogctU, Bib!ioteca Nacional, Fondo "José María Quijano Otero", Sala la, Número 9579, pieza Número 4). - Mauuo Cordato - Romance nacional por Manuel Ricardo Palma. El autor dedíca este romance a su apreciable amiga Ia señorita F. P. Lima. Tipografía del Meilsagero. 1853 2 p., 16 p. numeradas; 15 x 9 cm. (Bogotá, Biblioteca Nacional, Fondo "José María Quijano Otero", Sala 1" Número 9579, pieza Número 4 biu). v "LA FAVORITA" - PALMA, HOMBRE DE TEATRO "Contaba dieciocho años y hacía pininos de escritor y de poeta. Mi sueño dorado era oír, entre los aplausos de un público bonachón, los destemplados gritos: d autor! el autor!". Por aquel tiempo y al término de las tareas escolares, Palma alterna- ba sus quehaceres de ayudante de cro~istade "El Intérprete del Pueblo", con sus ensayos poéticos y con las mejores lecciones de vida, de ingenio y de ex- periencia que recibía en la tertulia de la Librería de Pérez, en la calle de las Mantas, donde se colaba de rondón para oir los comentarios de Segura o las mordaces apreciaciones de Buenaventura Seoane con motivo de algún recado transmitido por José Ramírez, quien, mitad cazurro, mitad pícaro, estaba siempre dispuesto a estos menesteres: --Cacaseno! Ve y pregunta a qué hora será el ensayo general! Allí, además, "cuando se agotaban los tópicos de política, literatura y teatro, a falta de mejor plato, se descuartizaba el prójimo". Frecuentaba el ambiente festivo que rodea la vida del teatro y comen- zaba a catar las zalameras sonrisas de las tonadilleras y a recoger impresiones y recuerdos de cómicos y consuetas; y "como Segura, Corpancha, Salaverry, los Pérez y demás bohemios de mi tiempo --anota con aíioranza, refirién- dose a Juan Sánchez Silva, el mejor crítico teatral del medio siglo- vivía in- timamente entre bastidores, mimado por los cómicos y las actrices". No es de extrañar, por lo tanto, que "los triunfos escénicos de Márquez y Corpancho despertaran en rni -dice en otro párrafo de "Ea Bohemia de mi tiempo''- el deseo de ensayar mis fuerzas en el drama y sucesivamente di al teatro tres monstruosidades", de las cuales fué, más tarde, el más ii-nplacable crítico, pero que, en su día, merecieron el mejor de los laureles: "Para los es- critores noveles -insiste en otra ocasión- no hay aplausos más codiciados que los obtenidos sobre el esceriario teatral. Aquello de oír, en todos los to- Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.12, 1956-1957