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LA ESCUELA NACIONAL PE BIBLIOTECARIOS DEL PERU 269 rraña gastos que la Escuela está imposibilitada de hacer. La situación actual no le permite contar con profesorado a tiempo completo. La Biblioteca espe– cializada de que dispone no puede brindar un servicio eficaz por el retraso de sus colecciones y escasez de títulos dc sus publicaciones periódicas; la partida para libros y suscripciones de revistas, que le señala el Presupuesto de la Bi– blioteca Nacional, es mínimo. Y si bien se han hecho esfuerzos por adquirir ma– terial pedagógico, éste no satisface las exigencias de la moderna didáctica. La falta de recursos no permite tampoco quc la Escuela tenga un local aparente: número suficiente de aulas, sala de profesores, sala de conferencias, laboratorio de práctica, etc. Finalmente cabe agregar, que la ausencia de una Ley que proteja el ejercicio profesional de los Bibliotecarios y asegure una remuneración justa por su trabajo, incide en la baja cantidad de postulantes quc solicitan admisión. G. Somera evaluación de la obra de los egresados. Desde 1944 hasta 1966, la Escuela ha formado 265 profesionales en Biblíotecología, las principales obras realizadas por ellos según nuestro pare– cer son: La organización de la Biblioteca Nacional, que se efectúo de acuerdo a las directivas de la Escuela; y la Clasificación de su patrimonio bibliográfico, según el esquema Decimal de Dewey adaptado y reformado conforme lo requiere la colección bibliográfica peruana. El crecimiento de esta Biblioteca, la calidad de sus publicaciones, el servicio que rinde a la colectividad en todos sus niveles, indican la eficacia de los bibliotecarios peruanos. El servicio de extensión bibiiotccaria en la provincia de Lima empieza con la inauguración del Bibliobús del Ministerio de Educación Pública, el 1 Q de agosto de 1957; este hecho y la inauguración de la nueva Biblioteca Pública Municipal del Callao, el 11 de febrero de 1958, marcan la iniciación del desarrollo de las bibliotecas públicas peruanas, desarrollo que se está realizando gracias al impulso quc los bibliotecarios le imprimen. El 7 de setiembre de 1962, la Biblioteca Nacional asumió la administra– ción de las rentas creadas por la Ley 10847, comenzándose el planeamiento de las bibliotecas públicas a nivel nacional. El Departamento de Fomento de Bi– bliotecas Públicas Municipales de la Biblioteca Nacional investigó el estado de las bibliotecas públicas en el país y como resultado de esta "auscultación de ne– cesidades" está brindando ayuda técnica a las bibliotecas más activas y auspi– ciando los Cursillos de Capacitación desde 1964. Nuestros profesionales trabajan en la actualidad en Bibliotecas de Minis– terios, Organismos paracstatales, Universidades, Instituciones especializadas y aun en la empresa privada, en cada una de estas bibliotecas contribuyen de manera eficaz en el cumplimiento de los fines de la Bibliotecología. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.16, 1966