Fénix 21, [88-183]

. - Iescuhri . 3 li n r: le ,1"oS (1esc~ .. l'H""H'''' Numerosas ll:tCj{}t)QS, establecidas en sus mutes rcspectlV<:s" y .goIJL;~Iadas por soberanos legíti'nios, culÜvab~all sus eampOH: y SI la hm~a1lldad, eXigía reforma en las,costm;nbres de algynos pueblos, que l~alntahall la parte septentrional <le este emis– ~ejJo, no por esto debían reernplazarseJos sacrificios que hacían á ~Ug "tlqlos: cop la espantosa carnicería de tantos millares de víctimas, é– ~l~e~t' rOl' pr~,texto la rehgolOn santa dernansedurnbrey de pÍ\z.Pe': t~J~$tos magmfi~;~s resto~ _~e tantos monumentos, guetaun se 'con-– r-~l:t~ en la Am~'l'lea mendlOn~l; estos soberv}os aqiiediictos y lo,! !!St1glOS de sus inmensos-trabajos para-el cultivo ..de las tierras mas t ?'.tS;. sus leyes pat~rnales y . sabias, de las que aun' se" conscr y ii1a .thcC:lOn ma.s autentIca? atestiguan 'por to(las'p~rtc;.$¡¡u pasada gran– , , industria y hummlldad,.~ preg:onan l:t infamia y la ferocidad .: SUs opresores. Venga el ~ lósofo lmp,u:cIaI: venga y compare el o actual con el pasado: Juzgue la sin razoucon que se han in– ;,do hasta ahora las sencillas costumbres) y la virtud de estos pue- ',. Si la naturaleza y eLcoI}vemo unánime delas naciones, no au– ~¡rlzan la fuerza, sino cuando se emplea por '8U propIa eonservacion , defGnsa; i, cómo pudieron abusar .de ella los primeros advenedizos ,.tta pueblos inermes, qde,. en vez. de castigar suósadía;lerb fran– íú~arQ}l la. mas cordial hospitalidad ?¿ Qué agravio' reeibiéron de sus ~?bentn9S par~ constituirse jueces. de ,su,s ptiyadas a.c~i~.r!es con ri– ~.lculas fm:m,ahdades: y.~o~denados a llfl lOfam.e SUpliClO";,C?ll leyes ~.tm. mas ridiculas que ellos ignoraban? (d) Necesitaba lacodlcia, en la ~mbriaguez de su furia, eellarasfcon Stl sangre los títulos de' la agre– ¡,on mas injusta. Así pagaba ¿[fanatismo los beneficios ,mientras \l~ la naturaleza , horrorizaaaeñ, medio de los estragos, negó tal .a ver cansada la. ferocidad esp~a, pero jamas satisfecha. Los monarcas de Espáñaconoc'jér6~la ñlilidad de estos títulos; lápelaronal santuario) para. cubrir, cqn,auveló' 1'a vil usnrpacion, ~tronó de los déspotas no¡:)uede snnslStjX",sftlo. a la.. ~Ol:nbra de los titares; y la abominable ti.raulusolo sediviñb'aeu·la. mistln'IDsa os– Jllriq~ul; de los templos. Allí ~s donde elmonstruo. ommoso de .la su– .'ersti'éion, sacudiendo su canezacrinadáde serpJem~s, fabrica .. la ~nda' vlascadenascon que ciega yesélaviiaJlos·pué'blo!.'.~.losd~s­ tilda.' dé todos sus derechos ;ydivid~ sus despojos entre el sacerdo– ,0 y el imperio. La antiguamitplogiahací'a: Oerivár"a-io~3~yes de QS mismos dioses: y,á esteorí~en fabúlosoj.se h~n sostltUldope~\les intepretaciones violentas de la ley.,d~I. e~an:g?ho)._para ~atrocl\r. abusos, los mas escandalosos. La'estu¡.né:la ·lgnorancH~ quedó al fin !f¡ultada en el }Jolvo de aquellos sig}os,b~rbáros s q ~e.ta ~!o han de– ".dado a la razón y la humanidad; y na~h.e puede sln~ldrgnarse re– ¡rdar en el dia íos abusos de la snpersticion, y l~ 'e:xtrava~ante bu- del Papa Ale::andro VI, en l~ qu~ por la. au!o'rldad del. tod;o .parle- lii(.e..).. COl.lcede a lo!, re.ye~ de .~s.:p.)an.a 13.... py.. o p. l"led.3.d.... Y..... el domm.lo.de ~ J,ltn Mondo. i Hasta aqm podl~lJeg"r}a l~npudenl;:la;y ~ ?eset~e íf~ tallJalic1a ! Alegar Iaautondad. del ser sup.remo; .<L ue ~s .Just~ por _ para cometer en su nombre la mas torpemJustIcJa) yt"'- llnelUetlte los derechos mas sagradQsdd ho~bfe: de\-ech~ que . dad misma ha estampado con caractére.l1uJelebleserpmes- ~) Watte! drait des. gens .. lib. 1. Cap. I'S. td) Aluhualpa fui j'i-/.i::gado ,'1} eonüenado por llls leyeS,,¡¡},I?; ircilazo. . . b P t (e) auctorilate ornnipliltentis Dei. nob~s Ut eaw e ro, Jl1)1:a~ de la bula. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.21, 1971

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