Fénix 23, 71-127

LA BIBLIOTECA DE OCOPA Este sistema divide, arbitrariamente, es cierto, pero con evi– dente utilidad práctica, todas las ramas del saber en 10 grupos principales, numerados del O al 9, cada uno de los cuales, a su vez, se subdivide en otros 10, y así sucesivamente, todo lo que sea menester, partiendo siempre de lo general a lo particular, del todo a la parte. En este sistema toda Materia y toda División de la misma está representada por un número clasificador, lo cual da la ven– taja de la concisión en la signatura y la posibilidad de extensión indefinida. Cuando se trata de bibliotecas de pocos volúmenes, se suele emplear esta clasificación solamente en sus divisiones por dece– nas, salvo en el caso de algunas materias en que será indispensa– ble subdividir más aún, para lograr una mejor diferenciación del material que se clasifica. Como es lógico, muchas obras llevarán el mismo número cla– sificador, por tratarse de temas iguales; entonces se diferencia– rán por la llamada notación interna, que no es sino la letra inicial del apellido del autor, o en obras anónimas, la primera letra del título, que va debajo del número de clasificación, más una o dos cifras, de acuerdo a una tabla de apellidos. Así se logrará individualizar cada libro, facilitando su bús– queda; porque si nos limitáramos a poner solamente la inicial del apellido del autor, aparecerían muchas obras de distintos auto– res con idéntica signatura, lo cual no debe existir nunca en las bibliotecas. Este es en pocas palabras el mecanismo del siste– ma decimal de clasificación. División. Según este sistema, la nueva clasificación de los fon– dos de la biblioteca de Ocopa es esta: 000 Obras Generales (enciclopedias) 100 Filosofía 200 Religión (Esquema reformado por el P.J. Heras) 300 Ciencias Sociales 400 Lingüística, Filología 117 Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.23, 1974