Fénix 24-25, 41-116

54 FENIX El Dr. Javier Pulgar Vidal, que ha realizado estudios sobre las quilcas, des– pués de analizar la palabra y seguir su trayectoria a través de miles de to– pónimos en quechua, aymara y español, la define en la forma siguiente: "Quilca es el nombre peruano actual de antiguos y aun supérstites sistemas gráficos muy bien representados en el Perú y en América y también fuera de nuestro Continente" 11. Como resultado de haber ubicado varios lugares a través del territorio pe– ruano donde encontró estas grafías, el Dr. Pulgar da una definición de lo que considera un Centro de Quillcas: "Llamamos 'Centro de Quillcas' a todo lugar en el cual exista una piedra aislada, grande o pequeña; un grupo de • piedras, un roquedal, un acantilado, un desfiladero, una marmita eólica, una semicaverna, una caverna pequeña o una gran caverna, en cuyas superficies planas, cóncavas o convexas, se halla inscrito por medio de pintura o por incisión, una grafía cualquiera o un conjunto de ellas" 12. Además, distingue dos clases de estas "grafías o quillcas": las pictografías y los petroglifos. Acerca de las pictografías, que también llama "Petrogramas", sostiene que generalmente, están pintadas a mano, sin plantilla y en varios colores como rojo indio, varios tonos de ocre, amarillo, azul, verde, negro. blanco, etc. Mientras que los petroglifos, que también llama litoglifos, son ge– neralmente incisiones que tienen una profundidad que fluctúa entre medio mi– límetro y tres o cuatro o más milímetros. Según la edad del glifo, ofrecen la coloración superficial de la roca en que han sido practicadas, o el color de la roca después de raspada y despojada de la capa superficial 13. Ampliando el sentido que da el Dr. Pulgar a los quilcas, podríamos conside– rar bajo este término, en general, a todas las manifestaciones escriturarias de los antiguos peruanos, pues no solamente en piedra, cuevas, rocas, etc., se encuentran signos semejantes sino también en diferentes elementos como alfarería, metales, telas, palIares, bastones, etc. Explica Raúl Porras: "No cabe, pues, duda de que los indios prehispánicos del Perú tuvieron una pala– bra especial para denominar los signos escritos y que esta palabra se aplicó más tarde por analogía a la escritura española y al papel que no conocieron los Incas. Esto no quiere decir que ambos sistemas de escritura fuesen iguales sino que se utilizó en quechua el término lingüístico más próximo o semejante para calificar el inven– to occidental. También se concluye que la palabra quilca estaba unida no sólo de signos gráficos sino de signos coloreados o de dibujos y pinturas. La voz Quilca trae de por si aparejada una representación cromática. Escribir, dibujar, pintar se expre– san por una sola palabra: quilca, y esta misma palabra sirve para expresar cl lienzo, la tabla o el objeto pintado" 14. 11. Lima Universidad Nacional Mayor de San Mareos. Primera exposición Nacional de Quilcas. Lima, 1963. 12. Ob. cit. 13. Ob. cit. 14. Porras Barreneehea, Raúl. Fuentes ... C. IV, p. 112. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.24-25, 1977

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx