Fénix 26-27, 261-270

STATUS DEL BIBLIOTECARIO 269 conocido, vale decir que la biblioteca tiene una misma línea de dependen– cia que otras oficinas (reporta al mismo ejecutivo), pero su jefe no os– tenta el mismo nivel que los jefes de éstas. Este fenómeno parece ser consecuencia de la adscripción de un menor status al bibliotecario y mues– tra una actitud ambivalente frente a la biblioteca: se reconoce su impor– tancia y especialización en la ubicación estructural y funcional pero no se consolida esta ubicación con la atribución formal de la jerarquía y au– toridad correspondientes. 2.2 Nivel Solamente en cinco sectores es posible contar con parámetros que in– dican con alguna claridad el nivel relativo del bibliotecario dentro del per– sonal. En el Gobierno Central, la mayor parte de jefes de biblioteca está en el grado cinco en una escala de siete grados, donde los profesionales con rango de jefe mayormente están en el grado tres. En dos casos, hay una diferenciación más explícita respecto al bibliotecario, ubicándolo como "téc– nico profesional", por debajo de la categoría "profesional". En las empresas privada y mixta la casi totalidad de jefes de biblio– teca o centro están considerados como profesionales y una cuarta parte con rango de funcionarios (vale decir con responsabilidades y nivel dife– renciados). Pero el nivel de los funcionarios encargados de biblioteca es generalmente menor que el de la totalidad de funcionarios profesionales. En los organismos internacionales los jefes de biblioteca están siempre en la categoría local, que en algunos casos es la única a la que tienen ac– ceso los nacionales, pero mayormente está reservada al personal administra– tivo, secretarias y asistentes (profesionales jóvenes). En este nivel, el bi– bliotecario se halla en los grados más altos. En dos organismos internacio– nales, hay sendos documentalistas extranjeros con categoría de funcionarios internacionales, pero no dedicados a supervisar el servicio de la biblioteca o centro sino más bien a labores de asesoramiento. En las universidades, los bibliotecarios son considerados profesionales no docentes (lo cual representa un nivel inferior a los docentes). Pero en una universidad existe un proyecto para diferenciar la categoría de profe– sionales no docentes en dos nuevas categorías: profesionales "A" (como médicos y abogados) y profesionales "B" (como bibliotecarios y conta– dores). 2 . 3 Remuneración No sería acertado intentar promediar ni aun comparar directamente los sueldos promedio de jefes dc biblioteca que se ha recogido en cada sector, debido a la diversidad de factores que influye en cada uno. Para fines de exposición conjunta, resulta conveniente agrupar los sueldos bási– cos promedio en 10 sectores y subsectores, que son los siguientes (en orden creciente de remuneración promedio): Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.26-27, 1979

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