Fénix 30-31, 257-269

258 FENIX América Latina 2. Este rnnajo no mfoca directamente ni Ba esi&ica :li las técnicas de La vanguardia. pero si plantea Iu ciguicnte pregun- ta: ¿hasta qué punto será válido ese enfoque, esa visión (visión urbana, "capitalina" si se quiere) de la actividad vanguardista en la América Latina de la primera postguerra? Sirva como punto dc partida un ponderable artículo del crítico Nelson Osorio, aparecido en 1981 en la Revista Iberoamericana 3. Pasaremos luego al comentario del Boletiiz T i ~ i k a k u de Puno (1926-1930), que constituye, por cierto, una de las publicaciones más "exóticas'" o -Lex-céntricas" de la vanguardia americana. Del artículo de Osorio, titulado ' Ta r a una caracterización histórica del vanguardismo literario hispanoamericano7'. queremos destacar los siguien- tes puntos de interés para nuestro tema: 1 ) Según Osorio, a pesar de su entusiasta apropiación de las técnicas literarias de la vanguardia europea, el "vaniguardismo" americano no es u n simple calco, n i debe ser considerads como "epifenómeno" de una renovación ariástica europea. Es, más bien, a a a respuesta a una nueva etapa de "intcrnacionalXzacI6n" de las condiciones his- tóricas del continente, en la que tendría especial importancia el rearreglo económico mundial y la expansión del imperio norteamc- ricano a raíz de la guerra europea de 1914-19118 (p. 229); 2 ) en América Latina, hay una marcada confluencia entre la actividad de la vanguardia artística y la de la vanguardia social y plática; tiene lugar u n "cuestionamienta genera1izacio"de todo lo estable- cido, que va mucho m& allá de lo puramente artístico (p. 231 ); 3 ) en el campo de la producción literaria, hay una eontaminacián recí- proca entre la literatura experimental, de un fado, y el "mundono- vismo", "criollismo", nregionalismo, indigenismo o como se le quie- ra denominar, de otro (p. 233). Y no es motivo de asombro el que Osorio destaque el poemario Aade (1926) del poeta puneño Alejandro Peralta, libro en que "los motivos jndigenistas y rurales se poetizan en u n lenguaje agresivamente vanguardista9', como res- paldo a su ataque contra cualquier esquema 'haniqueo" de la literatura postmodernista (p . 242). Efec~ivamente,la confluen- cia del nativismo, de la protesta social y de las técnicas "de van- guardia" en el ámbito peruano reeibi6 agudo comentario ya hace 2 Véase, entre otros, Merlín H Forster, 'Latin American I.anguardrsnro: Chronology and Terminology". en Trcdition cnd Re,zeu~l: bissnjs oz T,~~~rztrc~:lz ::e,t'rrrli La' n American Literature aizd Cirlturr. ed. Merlin H Forster (Urbana, lliinnis, Gniversity of Illinois Pres, 1973), pp. 13-14. Según Forster, "SLgniiicant llterary aetivdty is concentrated in, rhough not lirnitcd to, a rather small nurn2~ro£ major centers in Latin America and Europe." aunque rio deja de cifnr de varia.. revistas muy poco conocidas de la tanguardia. entre ellas plc,isamentc~ del Bolelzn que silve de tema para nuestro en-ayo 3 Velson Osorio, "Para una caraeterizueih histórica del vanguardi-mo literaBo his- panaamericano", Revista iberoamericana, No. 114-115 (enero-junio 1951), pp. 221-254. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.30-31, 1984

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx