Fénix 30-31, 257-269
VANGUARDISWTO 14 3800 m.: EL CASO DEL . BOLETIN TITIICAICA" 239 casi trcs décadas por Luis Monguío en su La poesía postmodernista peruana ( 1954) 4: 4 ) si bien el "vanguardismo"' o "arie nuevo" cs un fenómeno interna- cional, para el escritor latinoamericano el primer nivel de esa in- ternacionalidad Fo constituye el conjunto continental. Hay, du- rante la primera postguerra, "una profunda consanguineidad esté- tica" entre escritores ""de las más diversas latitudes del continente" (p. 249). "El surgimiento mismo de la literatura vanguardista en Hispanoamérica se nos presenta como una Lloración rnúltiplc, puesto que aparecen brotes casi simultáneas en la mayoría de las ciudades importantes sin que exista un nlxlclea irradiador precim o una con- certación programática" (p. 2417). Pero ya que los "brotes" o cen- tros de actividad artística mantenian contactos e intercambiaban novedades a menudo me iante revistas internacionales como las ya mencionadas Revista d e Avance y Amauta, pueden estudiarse ya no como 'Lislas" inconexas, sino corno parte de un verdadero "archi- piélago" (pp. 247-248). Resulta muy acertada la imagen espacial de un "archipiélago" utilizada por Osorio. Pero, las "islas" (dispersas, pero ya no inconexas) de este "ar- chipiélago", serán: ¿,las principales ciudades del continente? ¿los grandes emporios y puertos marátimos? No: permitimos aventurar aquí la hipótesis de que el llamado "arte nuevo" penetró mucho más hondo de lo que esta vi- sión permitiría suponer, llegando hasta la localidad y arraigándose, ya no sólo en las grandes capitales/puertos/emporios, sino en frecuentes casos en capitales de provincia y en poblados de menor importancia. Esta hipótesis supone que, del mismo modo que muchos poblados americanos de principios de siglo tuvieron su "Rubén", su poeta '6mddito" local, durante la primera década de la postguerra tampoco faltii el "'poeta fuutrista". el "poeta van- guardista", el Neruda aldeano. Conerct6mcnos: En la producción literaria peruana de los veinte quedan patentes dos modalidades complementarias de la vanguardia americana: su aspecto de "mo- ~imiento"internacional, y su aspecto de "brotc" o de fenómeno local. En el caso peruano, es llamativo el crecido número de "vanguardistas" de origen provinciano que se desempeñan durante la década. Basta enumerar a Va- Ilejo, Alberto Hidalgo, Alberto Guilléni, Guillermo Mercado, Julián Fe- :rovick (O. Bolaños), Serafin Delmar (R. Bolaiios), Narario Chávez y Alia- ga, Nicanor de la Fuente, Luis de Rodrigo (Luis A. Rodríguez), Emilio Armaza y Carlos Oqucndo de Amae -y la lista no es nada exhaustiva- para demostrar este ascrto. (No importa que el vanguardismo peruano fue- ra de poco arraigo y de corta duración, una "pátina", como dice Mirko Lauer. 1. Luis Monguío, La poesía postmodern;sta przmna (Brrkrley y Los Angeles: University of California Press, 1954). Consíiltese el Capítulo IV, "E1 nativismo literario en la poesia peruana", pp. 87-131. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.30-31, 1984
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