Fénix 32-33, 142-149

CARTAS DEL PRESIDENTE GARCIA CALDEKON si yo no acepto las modificaciones que proponen; pero no ha dado por terminadas las negociaciones y ha declarado que puedo permanecer en esta ciudad, lo cual á juicio de muchos quiere decir que remitirá el asunto al Congreso; y quiere tenerme á la mano pa. reanudar las negociaciones cuando convenga. Yo, por mi parte, tampoco he declarado terminadas las conferencias porque quiero que el tiempo me diga lo que más convenga hacer. Siguiendo esta politica he apla- zado mi respuesta á una proposición que me hizo ayer M. Logan. reducida á que firme con él el protocolo ya acordado entre los dos; pa. que el puqda presentarlo comoultimatum y exijir mi libertad. Es tal la desconfianza á que he liegado que á n e da m[e] decido, sino déspues de pensarlo mucho. Además necesito saber que piensa en Arequipa, de lo que estoy haciendo y todavía no tengo respuesta á las cartas que le he escrito. Por lo que hace á la opinión de Lima, ya estoy tranquilo con lo que tu me dices. La conducta de Iglesias es por demas censurable. Si su ejemplo cundiere, la división del pais hana imposible todo arreglo. Su afmo amigo. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.32-33, 1987

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx