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nuestras fuentes de riqueza. El magisterio que refulge en las expresiones "Petuenicemos al Perú" (Mariátegui) y "Perú al pie del orbe "(\/al/ejo) marca a toda la generación de Alberto Tauro, cuya monumental obra está signada por esa impronta peruanista que aprovecha la experiencia universal. El mismo desempeño profesional confirma este aserto: profesor de Historia en San Marcos, Director de la Biblioteca Nacional, miembro de la Comisión del Sesquicentenario de la Independencia, integrante de las Academias de la Historia y de la Lengua, así como de la Sociedad Bolivariana, del Centro de Estudios Histórico-Militares y de la Sociedad Geográfica etc. Un marcado tono libertario y progresista sobresale de su acusiosa y penetrante investigación. Esto lo podemos verificar en a) sus trabajos bibliográficos: Contemporáneos y Cultura (1938), El espejo de mi tierra (1942), Anuario Bibliográfico Peruano - 9 volúmenes- (1945-59), Bibliografía Peruana de Literatura (1931-58), Amauta y su influencia (1960), Bibliografía del Inca Garcilaso de la Vega (1966), etc.; b) sus textos desconocidos e inéditos sobre Amézaga, Castiila, L. B. Cisnetos, Chocano, Gamarra, Laso, Lavalle, Luna Pizarro, Martínez Luján, Adán F. Mejía, Palma, Pardo y Aliaga, Segura, González Vigil etc., c) sus antologías literarias e históricas: Poesía de la Historia del Perú (1948), Imagen del Perú (1960), Viajeros en el Perú Republicano (1967), La Independencia nacional y la politica de las potencias (1969), Antología de la Independencia del Perú (1972) etc.; d) estudios literarios e históricos: El Indigenismo a través de la poesía de Alejandro Peralta (1935), Amar/lis Indiana (1945), Esquividad y gloria de la Academia Antártica (1948), Historia e historiadores del Perú (1949), La fundación de la Biblioteca Nacional (1951), Perú: Epoca Republicana (1973), Clorinda Matto de Turner y la novela indigenista (1976), Enciclopedia Ilustrada del Perú-6 tomos- (1987). Hemos perdido a un gran maestro del siglo XX y a uno de los más grandes mariateguistas (recopilador de su obra, reeditar de "Amauta", Presidente de la Comisión de su Centenario) cuando el espíritu juvenil de sus ochenta años anidaba otros proyectos. Siempre recordaremos - acongojados- al querido y sabio profesor desde las aulas sanmarquinas, al colega generoso con el que compartimos múltiples labores literarias, al amigo entrañable - profundo y sencillo en su grandeza- La muerte se lo ha llevado tal como vivió siempre: dolido por el presente, pero al mismo tiempo esperanzado por el porvenir de nuestra patria (LA REPUBLlCA, 0·1. 03" 94) Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.36-37, 1990-1991

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