Fénix 45, 37-49

41 ( Somos, Caretas ) y páginas web no académicas (páginas con opiniones personales, sitios web comerciales, etc.). El esquema de clasificación utilizado se basa en el propuesto por Davis y Cohen (2001) pero ha sido modificado, ya que dicho esquema trata a los sitios web como una categoría distinta, mientras que para el autor del presente trabajo el contenido de un sitio web puede ser de naturaleza académica o no académica. Se consideró académicos a aquellos documentos que cumplieran dos condiciones: a) señalar de forma explícita las fuentes de información utilizadas; y b) presentar un razonamiento estructurado, coherente y con cierto nivel de profundidad, es decir, que no se limite a la descripción de los hechos. Por esa razón, los diarios y las revistas de actualidad no fueron considerados como fuentes académicas porque generalmente no cumplen esas dos condiciones. No es raro encontrar notas periodísticas con frases como «Nuestras fuentes nos informan...» o « Según nos informan...», sin señalar claramente la fuente que les proporcionó la información descrita en la nota. Esta forma de respaldar las afirmaciones es diferente a la que se observa en los libros o artículos de revistas académicas, donde la mención de la fuente original se hace (o al menos, debería hacerse) de tal forma que no queden dudas sobre la procedencia de lo que se afirma. A partir de los hallazgos de los estudios revisados en la primera parte de este artículo, el autor decidió someter a prueba la siguiente hipótesis de investigación: «Los estudiantes del salón en que el profesor estableció cuotas para las citas, en promedio, citan menos documentos no académicos que los estudiantes del salón donde el profesor puso énfasis en la variedad de las fuentes de información que los estudiantes pueden utilizar». Para someter a prueba la validez de la hipótesis se utilizará la prueba t, de student, para muestras independientes. A fin de ver si existe relación entre los tipos de documentos empleados para elaborar los trabajos monográficos, se utilizará el coeficiente de correlación producto/momento de Pearson, también conocido como «r» de Pearson. RESULTADOS YDISCUSIÓN Dado que la hipótesis asume que hay diferencias en los lineamientos dados por cada uno de los docentes, en esta sección se comparará los resultados encontrados en las dos secciones del curso Redacción y Argumentación. La sección donde el profesor estableció cuotas para las citas tomadas de Internet se identificará como salón A y la sección donde el profesor dio mayor libertad para emplear fuentes de información se llamará sección B. Se recolectaron 52 bibliografías del salón A y 28 del salón B. Con relación al total de citas, las bibliografías del salón B tuvieron, en promedio, casi el doble de citas que las del salón A. La diferencia resultó ser estadísticamente significativa (t=-4,77, g.l.=78, p<.0001); sin embargo, debido a la alta dispersión de los datos, este resultado debe ser tomado con cautela. En cuanto al número de citas de libros, el promedio de ambos salones fue bastante similar. En este caso, la diferencia no fue estadísticamente significativa (Ver tabla 1). Tabla 1: Datos descriptivos de total de citas y de libros * El asterisco indica significancia estadística (p < .0001) Total de citas Promedio Desv. estándar Promedio Desv. estándar Citas de libros Salón A 5,67* 2,35 4,31 2,36 Salón B 10,18* 6,04 4,71 3,11 Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.45, 2008

RkJQdWJsaXNoZXIy MjgwMjMx