Fénix 46, 203-224

–212– F énix n .° 46 / 2017 En España halla el Testamento de Pizarro y la Crónica Inédita de la Conquista del Perú, de Diego de Trujillo, 15 el documento más importante presentado al Congreso de Americanistas de Sevilla de 1935. 16 LA CASA DE COLINA La casa de la calle Colina 398, Miraflores, donde Porras pasó casi toda su vida junto a su familia, su madre y hermanas, cuenta con dos niveles y varios espacios propios a la distribución de una casona de fines del XIX y principios del XX. Entre sus pasadizos y habitaciones, el maestro desarrolló su obra, su legado. Fue el punto de encuentro de la cultura, la intelectualidad, lugar de debate y crisol de futuros intelectuales, donde las clases universitarias se prolongaban, donde los estantes atiborrados de libros inunda- ban habitaciones y demás. Es difícil poder imaginar la casa para quienes no la conocie- ron mientras era habitada por sus residentes originarios, difícil poder visualizarla por la cantidad de libros que debió significar la inmensa biblioteca ahí constituida. Como bien ha señalado Anahí Vinazza, muchos discípulos de Porras como Walde- mar Espinoza, Hugo Neira, Mario Vargas Llosa, han comentado que «[…] durante las décadas de 1950 y 1960, esa residencia fue un verdadero cenáculo, una prolongación de las clases y seminarios que el maestro impartía en las aulas sanmarquinas» (2002). Otros fueron, Pablo Macera, Miguel Maticorena, Manuel A. Capuñay, 17 Pablo Anglas, Duccio Bonavia, Carlos Araníbar. Así, consideraremos algunos testimonios para acercarnos a la imagen de cómo se encontraba la casa de Colina cuando la habitaba Porras. Tealdo da un testimonio valiosísimo que evidencia los gustos literarios ahí establecidos: Pasamos de una habitación a otra. El mismo panorama de libros. Anaqueles para la Literatura Peruana. Anaqueles para la Literatura de Francia. Anaqueles para la de España. «El Parnaso Peruano», de Cortés. 18 Folletos de los Románti- cos. «La Lira Patriótica», de Corpancho. 19 Y los queridos France y Taine y Renán. Tuve por ellos —me cuenta Porras— absorbente admiración (1948). Continuando con los testimonios sobre la casa de Colina, el galardonado escritor Mario Vargas Llosa, quien pasó sus días universitarios en cercanía a la historia más que a la literatura gracias al influjo de Porras, recuerda: 15 Porras lo publicó en 1936, ver Porras Barrenechea, Raúl. El testamento de Pizarro: texto inédito . París: Impr. Les Presses Modernes, p. 78 p. Para ampliar el estudio sobre Pizarro ver Varón, 2000. 16 En la colección Porras se ubica un ejemplar del texto de Diego de Trujillo, Relación del descubrimiento del reyno del Perú , publicado en Sevilla por la Escuela de Estudios Hispano-Americanos en 1948. 17 Manuel A. Capuñay, escribió una obra biográfica titulada Leguía: Vida y obra del constructor del Gran Perú , 1951. Fue director de la revista Generación en la década del 50. 18 La edición es Parnaso peruano de José Domingo Cortés, 1871. 19 Ejemplar es de Godofredo Corpancho, Lira patriótica o colección escogida de poesías sobre asuntos patrióti- cos para ejercicios de declamación . Lima: [s.n.], 1873. [3], p.80. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.46, 2017