Fénix 9, 352-412

"EL DISCRETO'> PERIODICO DE MANUEL LORENZO DE VIDAURRE 395 Art. 24. Un testigo convencido paladinamente de perjuro, será en el mismo acto borrado para siempre de la lista de los ciudadanos hábiles. Art. 25. Le queda el recurso de defender su inocencia; pero si en el segundo juicio sucumbiere, será desterrado por diez años y declarado infame. Art. 26. Cuando un testigo es estranjero, su declaracion se vertirá á nuestro idioma por dos personas. Este acto será discontinuo, de modo que la version del uno no sirva de regla al otro. Art. 27. Verificado esto se leerán las versiones al actor y reo, presen- te el testigo y los intérpretes. Ellos esplicarán al testigo las reflecciones, que se le hagan sobre lo que tiene declarado-Los intérpretes serán juramentados =Los intérpretes no podrán ser tomados de entre los testigos. Art. 28. Si el testigo es sordo y miudo, ocurrirán dos personas que ten- gan práctica de entenderlo-Se observarán con ellos los mismos requisitos que con los intérpretes. Art. 29. Intérpretes y prácticos serán recusables con causa legal. Art. 3.0 Si al tiempo de las declaraciones, estuviese presente alguna persona que no fuese llamada, y oyendo á un testigo, tuviese evidencia de que miente, pedirá la palabra al juez y dirá lo que sabe;, este acto será muy recomendable en un ciudadano. (Se Continuará) /p.6 1 Continúa la fraduccion de Jeremías Bmtham suspendida en el número 6" Pero este método tan propio al debate no es el de la concepcion, in- vestigacion, invencion. En éste las proposiciones particulares preceden á las jenerales. El asenso que se dá á las últimas, no se funda sobre el asenso que se ha dado á la primeras. Probamos las consecuencias por el principio, pero no llegamos al principio sino por las consecuencias. [l] Apliquémos esto á las leyes. En el plan que combate, era el objeto establecer de pronto los principios, y deducir de allí las leyes en detal; pero esta es una marcha falsa. Es preciso tener á la vista el sistema entero de las leyes, haberlas comparado unidas, para ponerse 'en estado de estraer con seguridad principios fundamentales verdaderamente sólidos, y capaces de sos- tener el ecsámen de una razon severa. ¿Una proposicion jeneral es verdadera? lo es solamente, porque todas las proposiciones particukres que contiene, son verdaderas. ;Como nos aseguraremos de la verdad de una proposicion jeneral? ecsáminando todas las proposiciones particulares que contienen. ;Cual es, pues, la marcha que es preciso seguir para remontar á un principio? es preciso tomar un cierto número de proposiciones particulares, hallar un pun- [l].-Comenzar el edificio por la cópula, (sic) no por los cimientos. Investigar el orijen de los colores, sin instruirse antes en la teoría de la luz. Fénix: Revista de la Biblioteca Nacional del Perú. N.9, 1953