La expedición libertadora

183 (108) Santiago, 16 de junio de 1820. Señor don Tomás Godoy y Cruz. Mi querido amigo: Con su apreciable del 3, he recibido la que usted me incluye de Buenos Aires ella detalla completamente la situación de aquel desgraciado pueblo: lo peor de todo es que no veo al ho– rizonte de nuestro estado la menor esperanza de despejarse. Sea de esto lo que fuere, ello es preciso trabajar para que los espa· ñoles no sean los terceros en discordia y se aprovechen de nuestras disenciones. Pasado mañana salgo para Valparaíso para embarcarme a las costas del Perú; el ejército lo verificará el 30. Esta jornada rn á decidir nuestra suerte; ella me cuesta bastantes fatigas y las que me esperan en el curso de la campaña; pero serán todas bien empleadas si se consigue el objeto de todos, mi ami· go, es decir, que bien sea la suerte próspera ó adversa me des– pido de usted para siempre, pues he tomado la firme resolu– ción de abandonar mi país. Si soy feliz, como espero, en la empresa, me quedará el consuelo de dejar a la partia sin ene· migos exteriores y de haber hecho en su favor cuanto ha estado en mis alcances por su felicidad. Hágame usted el gusto de ofrecer mis respetos al señor su padre y creer que en cualquier destino que la suerte me ponga, será uno de sus mejores amigos. José de San Martln DASM.-V.-529-568

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