La expedición libertadora

307 entre Alvear, Murgiondo, Carrera, etc. Dos de dichos papeles se contraen a decir que tenemos dos logias de francrr.asones y en ellas comprenden a medio pueblo; yo no siento sino que me hayan aso– ciado con Chilabert y algún otro, con que jamás hemos tenido, ni podré tener amistad: los demás honran a sus compañeros. Van adjuntos los papelones por si Alvarez se olvida; muéstrelos usted a mi compañero O' Higgins. Es todo de usted y eterno amigo, Juan Martín de Pueyrredón. P. S.- Me ha puesto usted en las mayores angustias con las libranzas que ha dado por los caudales de los correos, que ha de– tenido. Ha sido preciso pagarlas a la vista, porque de otro modo lo padecerá el crédito de usted, el mío y el de la administración toda, y para ello gradué usted como me habré visto para hacer de modo que fuesen todos los accionistas pagados, antes que se despachase el correo. He barrido al cabildo, consulado, aduana y cuanto había con algún dinero ajeno. Si viene otra hago bancarro– ta y nos fundirnos. Supuesto que por ahora lo que sobre todo in– teresa es mantener el ejército, creo que debe usted hacer presente el estado de falta de recursos en que se halla ese gobierno; y pe– dir que mensualmente se socorra por éste al ejército de los Andes con la ca'ltidad que se gradúe suficiente a sus necesidades; y con cargo a reintegro por ese Estado, pues no es regular ni justo que le :.irvan nuGstras armas y que también les mantengamos. Adiós mi compañero amado: Julián escribe a usted largo. (169) Señor don José de San Martín. Parece amigo mío que usted es el horóscopo feliz del reino de Chile, ape1<as pisa usted su territorio cuando empiezan a suceder– se las prosperidades. Recibí antes de ayer la noticia del apresa– miento de la "Reina María Isabel" en Talcahuano; y aunque viene