La Marina, 1780-1822

LA MARINA 309 das con don José de Arismedi. En 25 del mismo Agosto se le man– dó entregase 20 cajas de fusiles y 20 barrilitos de cartuchos que tomci del pailebot Aranzazu, y fue necesario segunda orden para que Ja c:ump1iesP.. EX.ACCIONES. A pesar de lo enorme e inexcusable que son los crímenes per– petrados por Lord Cocb rane, y que dejamos referido.e;;, aún hay otros de mayor magnitud que es necesario exponer a la conside– ración de U.S. para conocimiento de S.E. el Supremo Director. Cuando el Excmo. Sr. Protector contaba tener bloqueados por mar y tierra con auxilio de la Escuadra de Chile a los que se hallaban dentro del Callao, el Vice-Almirante de aquella lE!s permitía salir de la playa con sus caudales mediante cierta exacción; y aún a Jos españoles tomados en las fragatas Lord Lyndoch y San Patricic> les concedía se rescatasen, no obstante la orden que S.E. le había comunicado en 2 de agosto para que destinara un buque que sir– viese de pontón a todos ellos; por los oficios que él pasó al capitán don Roberto Foreste para que dejase entrar y salir libremente del Callao a su agente en aquel negociado, es demasiado evidente que no trataba sino de adquirir dinero sin cuidar mucho de Jos inte– reses de Ja América, que él perjudicaba ~on su condu.;ta. Pero dP. todas cuantas manchas ha echado Lord Cochrane sobre su vida pública, ninguna es mas horrible que Ja que vamos a poner a la vista de U.S. El incidente de que tratamos manifiesta hasta la evi– dencia que Lord Cochrane desprecia las leyes más samas del ho– nor y de Ja verdad cuando se trata de saciar su pasión dominante: la codicia. COCHRANE Y LA MAR. Con fecha 9 de agosto tiene la imprudencia de oficiar al gober· nador del Callao, Mariscal de Campo don José de la Mar, dicién– dole a la letra lo que sigue: "El Excmo. Sr. General en Jefe don José de San Martín me ha informado que propuso a U.S. que en el caso de rendirse esas fortalezas con el total de los intereses depositados en ellas sería permitido trasladarse al país que sus dueños gustasen, y hallándose en este momento la corbeta Curvay de S.M.B. en Jos Chorrillos, ofrezco a U.S. esta oportunidad para verificamiento, pagando a la persona que yo designase la tercera parte del principal que se embarcase, en cuyo caso mandaré un expreso pidiendo que la dicha corbeta se ponga en este puerto, si la contestación de U.S. lo requiere. En todo caso y tiempo ofrezco