La Marina, 1780-1822

LA MARINA 77 declara mandó tremolar su bandera en tierra con una salva de camaretas y repique de campanas, a la que contestó el Paylebot con todos los demás buques que habían en el puerto, fijando todos su bandera a la Patria. Que siendo esto como las seis y media del día, pasó a bordo el que declara con el Juez de Marina don Manuel Otoya a reconocer la custodia que había dejado a bordo Y preguntándoles qué novedad habían tenido le contestaron que ninguna y acercándose el que declara con el Juez de Marina a la Cámara la encontró cerrada en la misma forma que la habían dejado por la noche, y entonces fue quando el que declara mandó abrir dicha Cámara y entró a ella con el Juez de Marina y el Contramaestre Victoriano Cárcamo, hizo sacar los equipajes ce– rrados y trajo a presencia de todos a tierra, preguntándole al Contramaestre si había alguna otra cosa más de interés, solo le contestó que una encomienda de cintas, la que igualmente vino a tierra, depositando todo en su propia (fol. 57) casa el que de– clara, como que por momentos ya esperaba la venida del señor Comandante Militar del Partido, a quien se le había dado parte, y por supuesto que las llaves siempre se mantuvieron en depósi– to del Juez de Marina y los equipajes custodiados mas allá de lo regular hasta el tercero día en que llegó a este puerto el señor Comandante Militar que recibió dichas llaves el expresado Juez de Marina don Manuel Otoya, y mandó caminasen dichos equipa– jes para Piura con escolta a las órdenes del Subteniente don Ma– nuel Rejón. Preguntado si sabe qué cantidades de dinero traían los pa– sajeros, dixo: Que por declaración del Contramaestre supo el que declara que el Caballero Cortines traía doscientas y más onzas con seiscientos pesos en dinero, y otro comerciante ciento veinte onzas, asegurando dicho Contramaestre al que declara, que todo esto venía en sus arcas.. Que también uno de los declarantes ha– bía oído decir que el Caballero Quesada traía una cajeta de alha– jas de diamantes; mas asegura no haberla visto. Que en las demás cantidades no puede decir nada el que declara porque no las ha visto. Preguntado si sabe el crecido número de onzas de oro que se ha cambiado en este puerto de Payta, siendo así que antes de haber (fol. 57v) fondeado en él no se encontraban, dixo: Que efectivamente se cambiaron algunas onzas, no crecido número como dice Ja pregunta, quando estuvo en este puerto la Fragata de Guerra Macedorúa, la Pantera, Céfiro y Matilde, las quales todos su pagos que hicieron Jo verificaron en onzas, como mejor lo po– dría decir el Juez de Marina que vió el que declara hizo algunos

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